En la segunda sesión se utiliza un formato que luego se repite en todas las sesiones siguientes.
El plan típico para aplicar desde la segunda sesión en adelante, es el que se describe a continuación:
Los objetivos del terapeuta durante esta segunda sesión son ayudar al paciente a escoger un problema u objetivo en el que se centren.
Breve actualización y control del estado de ánimo y la medicación..
El control de estado de ánimo suele ser breve y se le puede combinar con una reseña semanal. El terapeuta compara la narración del paciente de su estado de ánimo con los puntajes de las pruebas realizadas.
Puente desde la sesión anterior..
Su propósito es controlar cuál fue la percepción y comprensión del paciente acerca de la sesión anterior. Al solicitar el relato de nuevas reacciones respecto de la sesión anterior, se puede obtener retroalimentación de las cuestiones importantes que el paciente no había expresado anteriormente.
Establecer el plan..
Es importante que el paciente aprenda las habilidades necesarias para armar su plan, de modo que pueda seguir valiéndose de ellos una vez finalizada la terapia. El terapeuta los instruye para que planeen problemas que requieran alguna clase de ayuda para alcanzar la solución.
Revisión de las tareas para el hogar..
Efectuar una revisión de las tareas para el hogar en cada sesión refuerza el comportamiento y pone de manifiesto el valor de las efectuadas en la semana, es decir, que no fueron en vano.
El terapeuta revista todas las tareas para el hogar durante la sesión y por eso consigna el tema del examen para tratarlo más tarde.
Tratamiento de los problemas establecidos en el plan, asignación de nuevas tareas y resúmenes periódicos..
Se le pregunta al paciente con cuál de los temas le gustaría comenzar a tratar. De manera que el paciente se pone activo y asertivo, y le permite tomar responsabilidades.
Síntesis periódicas..
A lo largo de la sesión, el terapeuta realiza dos clases de resúmenes.
- Una síntesis breve, que se lleva a cabo una vez completada cada parte de la sesión, para que el paciente y él tengan una comprensión de lo que se ha logrado en la sesión.
- Se realiza sobre los contenidos que el paciente expone.
Resumen final y retroalimentación..
En éste el terapeuta se ABSTIENE de activar pensamientos negativos y perturbadores en el paciente. El objetivo es aclarar al paciente los puntos principales tratados en la sesión de manera sencilla. A medida que el paciente avanza en la terapia, se va haciendo cargo de esta tarea.
Tercera sesión y posteriores..
Las sesiones posteriores se mantienen de la misma forma que la segunda sesión. El contenido varía según los problemas y objetivos del paciente y los propósitos del terapeuta.
A medida que la terapia progresa se produce una gradual transferencia de las responsabilidades al paciente. Hacia el final de la terapia es el paciente, quien designa la mayor parte de los temas en las sesiones.
El terapeuta se dedica a unir cambios de la conducta para que el paciente pueda poner a prueba ciertos pensamientos, creencias y, además, para que practique sus habilidades, tales como la asertividad.
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